Sueña con poder tener la oportunidad de jugar de nuevo de inicio.

Foto: portalcadista.com

Su semblante derrocha ilusión por jugar. Ya está olvidada su última lesión y sólo espera su momento de volver al once inicial, aunque sabe que es difícil hacerse un hueco en estos momentos. Le queda el trabajo diario. “Está complicado entrar en el once pero siempre hay posibilidades. Para eso trabajo cada día. Me encuentro bien. Las lesiones me han llegado cuando mejor me encontraba. ¿Si estoy como antes? Pues no sé. Tendría que jugar para saberlo. Pero me encuentro bien y espero la oportunidad de poder jugar”.

No cree que el partido del domingo ante el Cacereño sea de los vistosos. “Parece que será un partido de los llamados feos. Con pelotazos arriba, con un césped en mal estado y habrá que estar al máximo. Ellos no han perdido en casa desde hace muchos meses y allí habrá que salir a muerte”.

El hecho de que el encuentro pueda tener un fuerte componente físico podría beneficiar su regreso al equipo. Prefiere ser cauto y esperar las decisiones del míster. “Siempre tengo la ilusión de jugar. Ya sea en un partido que se presume feo como en uno bonito como el de Carranza la semana pasada. Es verdad que quizás por las condiciones del partido alguno puede pensar que me favorece más a mí o a otro compañero. Pero el que tiene que decidir es el míster”.

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