Los jugadores del Cádiz aún contienen la rabia cuanto pueden. Las decisiones arbitrales en Lugo y la indignación tras el partido aún colean. En el caso de Héctor Yuste, el centrocampista sigue sin explicarse muchas cosas que vivieron el pasado domingo en el Anxo Carro. “La semana pasada antes del partido dije que sus números hablaban y pedí que fuera justo. Cuando ves el primer gol y te cuentan en el descanso cómo ha sido, el tercer gol, el penalti… ves gestos que nunca has visto en un campo, hace que la cabeza te dé vueltas y pienses cosas. Y mira que yo nunca hablo de árbitros porque creo que son un colectivo al que se le da mucha caña. Pero cuando sufre eso en tus carnes, duele. Nos jugamos todos mucho y eso no se puede tirar por un arbitraje o porque alguien quiera”.

Entre esas cosas, está la actitud del árbitro. Algo que aún hoy sigue siendo motivo de conversación en el vestuario. “Me cuesta contar fuera lo que pasa dentro porque es un código del fútbol. Pero hoy sale una foto en el AS en la que el míster está indignado y el árbitro sale riéndose. Joder, si hay gente que está sufriendo y tú estás con esa tranquilidad, eso es el reflejo de todo”. 

Su confianza en el equipo sigue intacta. Aún más si cabe ahora, momento en el que espera que todo lo ocurrido en Lugo sirva como espoleta para conseguir remontar la eliminatoria en Carranza. “Esto hace que la gente tenga más ganas, que haya rabia y queramos jugar ya. Si se encauza bien esa rabia, si se es frío cuando el cuerpo pida otra cosa, será positivo. A la afición solo le puedo decir gracias por el año entero, a los que fueron a Lugo, a Madrid, a Albacete… No nos han fallado nunca y ahora tampoco lo van a hacer. Confío mucho en los compañeros, técnicos y en la afición. Con este campo lleno puede pasar algo importante”.