Tras la derrota ante el Real Madrid, el Cádiz CF se enfrenta a dos partidos seguidos como visitante que pueden marcar mucho su futuro más inmediato ya que ambos son ante equipos cercanos en la clasificación y rivales directos en la actualidad por la permanencia. No sumar ante el Real Mallorca (miércoles a las 21:00 h.) y ante el Celta de Vigo (lunes a las 21:00 h.) metería a los amarillos, además de en una alarmante crisis de resultados, en una situación más que delicada en la tabla clasificatoria. Por el lado contrario, lograr vencer en al menos uno de ellos haría abrir brecha además de insuflar de moral a un equipo que por momentos se muestra mentalmente débil y es incapaz de responder a los golpes recibidos. 

Serán además dos citas en las que Sergio González tendrá que acertar de manera obligada en el reparto de minutos y en la elección de efectivos para cada encuentro. Tras el choque frente a los merengues dos jugadores titulares como Ledesma y Chris Ramos acabaron con molestias y esto podría acarrear problemas añadidos. Las lesiones están siendo un obstáculo serio durante la temporada y resulta cuanto menos preocupante que el equipo haya vuelto del parón de tres semanas con dos efectivos menos en la medular como son Kouamé y Escalante. Ante los merengues fue Álex Fernández quien acompañó a Rubén Alcaraz.

El técnico cadista también ha puesto el foco en estos dos partidos entendiendo la importancia de los mismos. “Ahora tenemos dos partidos trascendentales, contra Mallorca y Vigo. Vamos a pelear contra equipos a partir de ahora que están iguales que nosotros”, expresó en rueda de prensa tras la derrota de ayer.

No es la mejor versión del Cádiz la que muestra lejos del Nuevo Mirandilla, pues los cadistas han sumado solo un punto en seis partidos, siendo el peor equipo de la categoría como visitante empatado con Almería y Granada. Tanto baleares como gallegos tampoco pasan por un buen momento. El Mallorca solo ha sumado un triunfo en lo que llevamos de competición y lo lograron precisamente contra el Celta el 16 de septiembre. Los vigueses por su parte también tienen en su haber un solo triunfo, ante el colista Almería el 1 de septiembre. Son por tanto dos conjuntos que también acuden con las mismas urgencias y necesidad de lograr tres puntos cuanto antes mejor porque, al igual que el Cádiz, de no lograrlo su escenario en la clasificación podría tener ya tintes preocupantes.