La última cita del Cádiz tuvo que ser afrontada por Gaizka Garitano con dos bajas en una misma posición ya que tanto Brian Ocampo como De la Rosa caían en combate lesionados en Málaga. El técnico vasco solventó la complicada papeleta dando entrada en el once frente al Granada a Melendo, con Ontiveros y Sobrino en las bandas. Sin parte médico oficial por parte del Cádiz, aunque con la confirmación por parte del entrenador de que se trataba de problemas musculares leves, tocaba esperar el período de recuperación de ambos extremos.
Al menos uno de ellos parece que lleva la delantera en ese sentido ya que al uruguayo se le ha visto entrenar junto al resto del grupo este jueves. Ahora debe ser el propio Garitano el que, con la valoración que hagan el cuerpo técnico y preparadores físicos, deberá decidir si el charrúa viaja a Tenerife para enfrentarse al conjunto blanquiazul este domingo. Un encuentro para el que tiene una baja por sanción como la de Fede San Emeterio.