Éste es el Cádiz B que todos queremos (4-0) | |
Un filial pletórico golea al Marinaleda pese a la nefasta actuación arbitral. |
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Así es el Cádiz B. Cuando más problemas sufría, cuando el equipo parecía haber entrado en barrena, cuando se escuchaban críticas hasta dentro del vestuario, cuando incluso algunos se empezaban a bajar del barco… apareció el filial de las grandes ocasiones con una goleada al Marinaleda, un equipo que no es ni la sombra del que el pasado año sorprendió luchando por el ascenso a Segunda B. Hoy, los sevillanos se mostraron siempre como un equipo inferior al filial cadista y ello pese a contar con la inestimable colaboración del colegiado del partido, el onubense Núñez García, que se está especializando en montar el “show” cada vez que pasa por El Rosal. Ya lo hizo la pasada temporada en el partido contra el Sevilla C pero esta mañana se ha superado a sí mismo con una actuación lamentable. Todo comenzó al borde del descanso, cuando señaló un penalty muy discutible a favor del filial, y continuó en la reanudación cuando, quizás presa del sentimiento de culpabilidad, intentó compensar tirando de tarjeta roja para mandar a la ducha a Juanito y Pecci por sendas jugadas que ni siquiera eran merecedoras de falta. Si Núñez García es un pésimo árbitro y lo demuestra cada vez que viene a El Rosal, sus asistentes no se quedan atrás ni en desacierto ni en afán de protagonismo, hoy en especial el auxiliar de la banda cercana a la grada. Pero no permitamos que estos señores eclipsen el excepcional partido de los chavales. Desde el primer minuto, el equipo demostró que los sinsabores de la semana habían sido muy bien asimilados por el grupo sobreponiéndose hasta al árbitro con un gran partido pletórico de orden, fuerza y compromiso. No podemos dejar de reseñar a Ángel Oliva, un técnico humilde que de nuevo demuestra su capacidad para levantar a un vestuario y sacar petróleo de lo que hay. La segunda parte se inició con el Marinaleda metiendo miedo. Una falta al borde del área que sacó la barrera y un remate que se marchó flojo fueron la tarjeta de visita del equipo sevillano. Sin embargo, a los amarillos les sonreiría la suerte en su primera aproximación al área rival. Rubén Pérez recibe un balón aéreo en el interior del área y, de espaldas a portería, cabecea suavemente la pelota al palo derecho de la meta visitante. Parecía que el choque quedaba franco para los intereses locales pero el árbitro se empeñó en evitarlo sacándose de la manga, en apenas dos minutos, las expulsiones de Juanito y Pecci. El Marinaleda cogía fuelle y se hacía dueño del balón mientras, el colegiado, con los papeles ya perdidos, continuaba su recital perdonando la expulsión del visitante Cisco tras agredir a Lolo Armario con el balón parado y el linier también ponía de su parte cortando los contragolpes del filial con fueras de juego inexistentes. Pese a todo, los nueve futbolistas del Cádiz B controlaron sin muchos apuros a un Marinaleda carente de ideas. Incluso parecía más cerca el 3-0 que el 2-1. Lolo Armario se puso el traje de gala y comenzó a surtir de balones en profundidad a un Fran que corrió y luchó una enormidad. Y efectivamente, llegó el 3-0 en un magnífico contragolpe en el que el balón pasó por las piernas hasta cinco jugadores cadista antes de que Paris se plantara frente a Casi y lo batiera. Segundo gol del defensor amarillo, jolgorio en la grada y “cariñosos” recuerdos hacia el trío arbitral que continuaba a lo suyo expulsando a Jesús Gallo, preparador físico del filial. Con el partido ya sentenciado llegaría el cuarto tanto en una jugada excepcional de Javi Catalán, que había salido poco antes por un ovacionado Fran. El extremo isleño cogió la pelota en la banda derecha de su propio campo y, tras marcharse de dos defensores, se plantó muy escorado ante el meta Casi batiéndole en lanzamiento cruzado al palo contrario. Hacía años que no se veía una fiesta como ésta en El Rosal. Ya era hora de que jugadores, técnicos y, sobre todo, la fiel y escasa afición incondicional del Cádiz B disfrutara de un partido como éste.
Reportaje de fotos:
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