El próximo rival del Cádiz está siendo sin duda alguna la sensación de esta temporada en el Grupo IV. La Hoya Lorca, recién ascendido a Segunda División B, es a estas alturas un sólido aspirante a ‘campeonar’ la clasificación a final de la campaña. Sus números son de infarto: 16 victorias, 7 empates y tan solo 2 derrotas. Además cuenta con la ventaja de no tener presión a la hora de lograr objetivos pues con el que partieron al principio de la competición, que no era otro que el de la salvación, está ya sobradamente cumplido. Ahora sueñan con estar en lo más alto y poder dar el salto de categoría.
Pero los guarismos que más llaman la atención son los doce goles que tan solo ha encajado en 25 encuentros. Una prueba más de que en esta división de bronce el no recibir tantos es casi tan importante como el hacerlos, un concepto que pocas veces se comprende.
Con un presupuesto de los más bajos, apenas 300.000 euros, el equipo lorquino está deslumbrando a propios y extraños. Parte de ese mérito está en su director deportivo, Manolo Molina. En declaraciones a COPE Lorca, Molina explicaba que “un empate o una victoria ante el Cádiz el próximo domingo significaría mantener esa distancia que ahora tienen sobre los amarillos. Sabemos que el domingo va a ser un partido complicado porque el Cádiz tiene como objetivo meterse en playoff y para ello se ha reforzado mucho en este mercado invernal”.
Sobre las metas de su club, lo tiene claro: “nuestro objetivo es la salvación y ese está ya al alcance de la mano. A partir de ahí nuestra ilusión y la de toda la gente que nos apoya es estar ahí y si puede ser, llegará al final de la temporada estando entre los cuatro primeros. Quedan 13 jornadas en las que todo se complica mucho pero por el buen camino sí vamos”.