Frente al Betis B, Ferri tampoco pudo estar en el banco. Foto: racingclubportuense.com

El Rácing Club Portuense presentó a Alberto Ferri como técnico del primer equipo en el mes de Julio y, aunque hace tal labor, aún no ha podido sentarse en el banquillo de su equipo. La razón es muy simple: el club del Puerto de Santa María aún adeuda cantidades que sobrepasan los 240.000 euros a Jose Luís Burgueña, Carlos Orúe y el segundo de éste Manolo Perdigones.

Por ello el Colegio de Entrenadores, a través de la RFEF, ha prohibido sentarse en el banquillo al técnico catalán mientras no se paguen dichas deudas con sus anteriores inquilinos.

Ya son dos los encuentros en los que Ferri no ha podido ocupar su puesto y ha tenido que seguirlos desde la grada. Su enlace en la banda es el delegado del equipo y ex cadista Javier Zafra, quien a través del teléfono móvil sigue las indicaciones del entrenador y las transmite a los jugadores. Esta próxima jornada ocurrirá lo mismo frente al Cádiz CF en el José del Cuvillo.

Esta situación, según Ferri, debe solucionarse antes de la quinta jornada porque si eso no ocurriera el Rácing podría perder sus encuentros jugados hasta la fecha por 0-3 por orden federativa.