Explicó su negativa a hablar con la prensa durante los últimos días.

Foto: portalcadista.com

El extremeño volvió a hablar con los medios de comunicación tras unos días sin hacerlo. El motivo, según el jugador, fue la malinterpretación de unas palabras suyas en un entrenamiento del equipo. Ya, en lo estrictamente deportivo, mostró su preocupación por la capacidad defensiva del Jumilla, un equipo que vendrá a defenderse con todo. “Vamos con desventaja con respecto a otros rivales y hay que sumar de tres en tres. El rival va a ser complicado porque, según nos ha explicado Jose, se encierra bastante, defiende muy bien y con mucha gente, y eso en Carranza se va a multiplicar por tres. Van a estar supermotivados como todos los equipos que juegan contra el Cádiz. Tendremos que tener mucha paciencia para ganar el partido”.

Espera que la afición esté con otro ánimo tras la victoria en Caravaca y el hecho de que esté Jose al frente del equipo. “Ahora el equipo tiene otro entrenador, venimos de ganar fuera después de tres jornadas sin hacerlo y la gente puede tener un poco más de paciencia aunque ésta no sea infinita. Tenemos que intentar adelantarnos cuanto antes en el marcador y, si no es posible, intentar aislarnos del nerviosismo que se pueda crear en el ambiente”.

El nuevo técnico ya sabe lo que es entrenar a Enrique Ortíz, con el que ha coincidido anteriormente en el Cádiz CF. “Jose me conoce desde hace muchos años. Él será el que decida en qué puedo ayudar al equipo, lo que pueda dar para ayudar a los compañeros. He oído por ahí que con Jose yo no jugaba… pero cuando Jose estuvo en la última etapa, había un chaval que se llama Pablo Hernández y era complicado jugar. Independientemente de eso yo entreno cada día para intentar estar en el once y a partir de ahí intentar ayudar al equipo”.

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