Espera que las derrotas traigan al menos unión en el equipo y signifique un impulso.

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Realizó un gran partido en Écija a pesar de la derrota. Sus dos goles no sirvieron para nada pero el pasado fin de semana vimos momentos del Carlos Caballero que todo el mundo quiere. El centrocampista explicaba en rueda de prensa la obligatoriedad de conseguir los tres puntos en Carranza este domingo. “Ahora vienen unos partidos en los que podemos coger una buena racha, pero hay que empezar por ganarle al Lucena. Eso es primordial, obligatorio”.

Las derrotas siempre conlleva la aparición de los nervios, y más aún conforme se acerca el final de temporada. El madrileño era consciente de la situación de esta temporada pero cree que la tensión motivada por los resultados es lógica. “Se sabía que esa presión iba a existir durante el año. Con Risto también se criticaron cosas y entre nosotros mismos hay un ambiente tenso. Ha habido nerviosismo entre nosotros pero es lógico con estas derrotas”.

Espera que este último traspiés sea un punto de inflexión y está convencido de que el equipo se encuentra preparado para afrontar la situación. “Ojalá sirva este último partido como un impulso. Nosotros intentamos lavar los trapos sucios desde dentro todo el año, no sólo a partir de ahora. Dentro del vestuario el grupo está fuerte para arreglar los problemas que hay. Estamos centrados pero en algunas jugadas tenemos que ser conscientes que en un segundo se nos complica mucho todo”.

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