Ha hecho ejercicios, aunque más suaves que los otros porteros

Foto: portalcadista.com

La imagen de la mañana en El Rosal quizás haya sido ver a Dani Miguélez con los guantes de portero enfundados y haciendo ejercicios con el resto de cancerberos a las órdenes de Miguel Ángel Bazán. El gaditano, que obtendrá el alta médica el próximo 3 de mayo, quiere ir ganando días para el final de su recuperación y poder estar cuanto antes.

Tras su operación de hombro, el primer paso fue realizar ejercicios de movilidad así como carrera continua. Ahora sube otro escalón en su proceso físico. Recordemos que su lesión se produjo el pasado 6 de febrero en Yecla y que una semana después fue intervenido quirúrgicamente de la rotura de ligamentos. Desde un principio el guardameta ha defendido poder estar disponible para la llegada del playoff de ascenso.