El sanluqueño lamentaba que los tres puntos de Melilla no hubieran sido refrendados con una victoria en casa. “No nos podemos permitir el lujo de echar por la borda en casa una victoria fuera como la de Melilla. Ellos se pusieron por delante una jugada que sabíamos que era su fuerte. Lo hemos intentado una y otra vez y fruto de ello llegó un empate que sabe a poco”.

No ha dudado en afirmar que le gustaría más que la afición animara durante el partido y que en el caso de querer demostrar su descontento lo haga una vez finalice. “No me importa que se cebe conmigo. Entiendo que piten y se quejen. Es lógico. Pero si todo el mundo quiere que ganemos, que ascendamos, que anime durante los noventa minutos y que cuando pite el final, si tiene que pitar lo haga. Lo entiendo. Al final todos queremos el ascenso. Y si no remamos en la misma dirección, será más difícil”.

De titular, a no convocado y de nuevo titular esta semana. Kike Márquez no quiere ver más allá de ello y lo acepta como algo normal en el fútbol. “No busquéis polémicas donde no la hay. El míster es el que decide y si no juego lo hace otro compañero que también lo hace bien. Los futbolistas nos adaptamos a todo. Ese es el fútbol. También hay compañeros que dan la cara y que también quieren jugar”.