Contento se mostraba Álvaro Cervera al finalizar el encuentro. No solo por el pase de ronda sino también por el buen partido que había hecho su equipo y el gran ambiente que mostró Carranza. “Se pasó la eliminatoria, hemos corrido muchísimo ante un equipo que juega muy bien, que salió con cinco atrás, con mucha gente por dentro. Hemos corrido mucho. Sabíamos que íbamos a tener ocasiones a la contra, sufrimos hasta el final ante un equipo que nos ha hecho daño pero no nos ha hecho ocasiones. Estoy muy contento porque es increíble juegue quien juegue. Se matan y ver el campo como está en un partido copero de miércoles. No puedo decir nada más”.

No encuentra explicación por la expulsión recibida. Cuando el entrenador cadista comparecía en rueda de prensa aún se desconocía los motivos que el colegiado había redactado en el acta. “Es la tercera expulsión desde que estoy en Cádiz, me imagino que algo estaré haciendo mal. Cuando ocurre me dicen que tengo que callarme, pero me gustaría que en el fútbol que tanto avanza se pudiera ver lo que pasó entre el árbitro y yo. A partir de ahí debe tomar decisiones, porque al final tenemos que creer a una persona. No nos escuchan, solo es lo que pone el árbitro. No ha habido absolutamente nada, yo soy un entrenador que estoy más tiempo sentado que de pie. Hoy no he dicho absolutamente nada. Le he dicho "tranquilo, tranquilo", ojalá se pudiera ver para saberse que yo no he hecho nada”.

Aunque hoy había una gran parte de jugadores que no eran los habituales en liga, a Cervera no le gusta que se distinga entre titulares y suplentes. “Nosotros no utilizamos la palabra titular, cuando hablemos de titulares y suplentes no seremos el Cádiz. El Cádiz es un equipo que juegue quien juegue lo hace siempre igual. Hay que hacer un esfuerzo, y jugadores que no vienen jugando lo dan todo, se vacían, y en el 70 están muertos. Solo puedo decirle que gracias, que estoy encantado con ellos y ojalá podamos seguir con ellos mucho tiempo”.

Sobre la vuelta de David Barral, dejó claro que todo ha quedado cerrado. “No tengo ningún problema con David en el campo, hace al dedillo todo lo que le pido. El problema fue fuera del campo. Yo me centro en el campo y él se tiene que centrar fuera. Barral es muy bueno pero nosotros, para que el Cádiz siga siendo bueno, hay que guardar unas normas que a él se le escapó y hubo que cortarlo”.