El Cádiz afronta el próximo partido ante la UD Las Palmas después de no encontrarse con la victoria en los últimos partidos en casa. Álvaro Cervera comparecía en rueda de prensa tras la sesión de entrenamiento de hoy viernes y en la misma comenzaba hablando de lo que significará enfrentarse al conjunto canario. “Es verdad que los últimos partidos de Carranza no los hemos ganado y parece que nos gusta más jugar fuera pero no, nos gusta más jugar en Carranza. Vamos a enfrentarnos a un equipo peligroso, que es verdad que no tiene buenos resultados, pero creo que ahora son más peligrosos que hace un mes. Ellos van apretados y nosotros también”.

Los tres empates como locales quizás hagan que la búsqueda de la victoria sea más necesaria si se quiere estar entre los seis primeros. Cervera entiende la exigencia, pero de la misma forma también que esta a veces no es tan positiva. “Las exigencias en el fútbol son normales, pero no por normales son buenas. Se exige porque a todo el mundo le gusta ver a su equipo arriba. Algunos jugadores lo llevan bien, otros no tanto”. Entiende por tanto que quizás sea necesario bajar la presión. “La gran equivocación es tener la obligación de hablar del playoff. Nosotros hemos tenido rachas malas desde que estoy aquí, siempre se ha cuestionado al entrenador y al equipo. Ahora se cuestiona que el equipo pueda luchar por el ascenso y es una obligación. Tenemos una oportunidad, pero se ha vuelto en obligación desde hace unas semanas y eso no puede ser”.

Es urgente cortar la sangría de ocasiones que el Cádiz concede a sus rivales, algo que a Cervera no le gusta nada. “Que el equipo defendiera bien nunca ha gustado, siempre ha gustado que atacara bien. Ahora no hacemos nada bien. El contrario nos crea ocasiones, muchas, y eso no lo patrocino yo”.

Todos sabemos qué tipo de mediocentro hace ayudas, quién la pasa según qué circunstancia y creo que sé cuál es la mejor manera de hacer bueno a este equipo. Tengo que tener la fuerza necesaria para cambiar esto, para llevar al equipo a donde consigue disputar los partidos”. Se ve responsable por ello y a la vez capaz de cambiar lo necesario. “Esto lo voy a cambiar. El equipo que yo entreno no puede hacer eso. Me siento culpable porque no es el fútbol que me gusta. El desorden del otro día tengo que cambiarlo”.

Lo que sí tiene claro es que eso no va a pasar por usar un trivote. “No me planteo ahora mismo cambiar el sistema. Con la cantidad de jugadores de ataque que tenemos no me planteo cambiar, creo que tenemos que jugar con dos arriba y uno haciendo algo de enganche. Poner a Álex de enganche no me lo planteo”.