En España ahora mismo, dependiendo de la competición que se trate, los estadios tienen público o no en sus gradas. Por un lado, tanto en Primera como en Segunda División estas siguen vacía desde el inicio de la pandemia de Covid-19. Sin embargo, otros como en Segunda B o Tercera, dependiendo eso sí de la comunidad autónoma, se permite un porcentaje de aficiones.

Una situación que por parte de la asociación Aficiones Unidas, que comprende a las Federaciones de Peñas de equipos españoles, no se entiende y por lo que ha elevado una queja tanto a Sanidad como al Consejo Superior de Deportes.

El presidente de Aficiones Unidas, José Manuel Mateos, ha solicitado mediante una carta dirigida al ministro de Sanidad, Salvador Illa, y a la presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD), Irene Lozano, la vuelta a los estadios de forma progresiva y con los protocolos de seguridad adecuados. Esta propuesta se produce después de una consulta que Aficiones Unidas ha realizado con sus asociados, entre los que se incluyen 39 federaciones de peñas, 8.000 peñas y 800.000 peñistas.

José Manuel Mateos expresó en la comunicación enviada a los dirigentes que “conocida la situación actual, y primando por encima de todo la salud de los asistentes, nuestras federaciones de peñas no entienden por qué, según la competición que juegue su equipo, se pueda acceder o no a presenciar los partidos”. “Si el problema es la salud, esta no entiende de categorías profesionales y sí de cumplir las recomendaciones que el ministerio de Sanidad traslade a los ciudadanos”.

Cabe recordar que las únicas categorías españolas en las que no está permitido el acceso de público son las profesionales, Primera y Segunda. El pasado fin de semana comenzó la Segunda B y ya se registraron algunas entradas significativas: 3.000 espectadores en Riazor, 700 en Los Pajaritos, 3.000 en El Sardinero y 800 en El Arcángel de Córdoba.

Por otra parte, la UEFA también ha autorizado la ocupación del 30% del aforo en los partidos de competiciones europeas, una decisión que no gustó a Irene Lozano. De hecho, la presidenta del CSD envió una carta al presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, en la que le mostró su “profundada preocupación ante la posibilidad de que la UEFA autorice la presencia de espectadores y público”.

Desde Aficiones Unidas se defienden las medidas aperturistas desde la convicción de que un cumplimiento estricto del protocolo no pone en riesgo la salud de los aficionados, tal y como se ha demostrado en los partidos con público. Con los lemas #FaltamosNosotros y #VolvamosALosEstadios, Aficiones Unidas espera propiciar cuanto antes el regreso del público a las gradas.