El Cádiz buscará este viernes sus primeros puntos de la temporada. Con un paupérrimo bagaje en las tres primeras jornadas llegan los de Sergio González a Vigo, pero también con la firme convicción de que se puede cambiar la dinámica. Con la recuperación en los últimos días de jugadores con problemas físicos así como la llegada de los últimos refuerzos, ya en buena parte disponibles para el entrenador, se espera que la mejoría del juego y que eso se empiece a traducir en resultados.

Un estadio que fue importante para los cadistas la pasada campaña, en la que el comienzo tampoco fue bueno. En las cuatro primeras jornadas los amarillos, por entonces entrenados por Álvaro Cervera, solo habían logrado dos puntos tras empatar con Levante (1-1) y Betis (1-1), y caer frente a Osasuna (2-3) y Real Sociedad (0-2). Aunque por entonces no se habitaba en la zona de descenso, sí empezaba a ser urgente conseguir un triunfo que diera algo más de confianza. Y ese, el primero de la temporada, vendría en la quinta jornada visitando al Celta. 

En aquel partido Lozano y Espino marcaron los dos tantos cadistas, que fueron contrarrestados en la segunda parte por otro de Santi Mina. Un partido que no estuvo exento de sufrimiento pues en la recta final incluso los gallegos pudieron merecer el empate, con remates al larguero de Aspas y Murillo. Aquel día el Cádiz basó su triunfo en el trabajo colectivo y la efectividad en el área contraria. Dos aspectos de los que venía adoleciendo entonces, de la misma manera que ocurre en la actualidad. Sin duda este viernes sería un buen momento para que volvieran a relucir dichas virtudes y que los primeros puntos caigan del lado cadista.