El pasado sábado 1 de abril, el Cádiz CF se enfrentó al Sevilla FC en un partido correspondiente a la 27ª jornada de LaLiga Santander. El encuentro, que tuvo lugar en el Sábado de Pasión, fue aprovechado por la entidad gaditana para homenajear a una de las fiestas más importantes de la ciudad, la Semana Santa de Cádiz.

En esta ocasión especial, el primer equipo amarillo, a través del Pacha Espino, lució un brazalete de capitán diseñado en honor a la Semana Santa gaditana. El diseño del brazalete incluía una horquilla, símbolo inigualable de la forma en que se llevan los pasos en la ciudad, que es exclusiva de esta localidad y se remonta a siglos atrás.

Esta tradición proviene de los hombres de la mar que trabajaban en el muelle gaditano descargando cajas de pescado de los barcos y que cargaban al hombro los pasos. Los cargadores llevan el peso directamente sobre el hombro, sin protección, sosteniendo la 'viga' de madera de la estructura del paso.

Además, otro elemento distintivo de la Semana Santa en Cádiz es el inconfundible sonido de las horquillas golpeando el pavimento mientras se mece el paso. Los pasos que no llevan banda van marcados únicamente por este evocador soniquete que resuena en los adoquines de la noche gaditana, creando una atmósfera única y emotiva.

Este homenaje se sumó al ya realizado en el cartel del partido ante el cuadro hispalense, que también estaba dedicado a la Semana Santa de la capital gaditana con la figura del Nazareno de Santa María procesionando.

A pesar de los esfuerzos del Cádiz CF, el equipo cayó derrotado por 0-2 ante el Sevilla FC en un encuentro en el que lucharon por dar lo mejor de sí.