Antes del encuentro entre el Cádiz CF y el Real Madrid el 15 de abril, se llevó a cabo un emotivo minuto de silencio en memoria de Tomás Morillo, quien falleció el pasado 7 de abril a la edad de 86 años. Morillo fue un referente en el cadismo y dedicó 30 años de su vida al Cádiz CF, impulsando el crecimiento de la cantera y las secciones inferiores del club.

Tomás Morillo comenzó su larga trayectoria con el equipo gaditano en la campaña 1978-79, bajo la dirección de Manuel Irigoyen. Durante su tiempo en el Cádiz CF, Morillo presenció y participó activamente en los mejores años del fútbol base del primer equipo de la ciudad. También vio al equipo competir en Primera y Segunda División A, y tuvo un breve paso por la Segunda B en la década de los 90, llegando a ejercer como asesor de Antonio Muñoz.

Su meticuloso trabajo y dedicación al desarrollo de jóvenes talentos en el club dieron sus frutos, ya que varios jugadores destacaron en el primer equipo y fueron traspasados por importantes sumas de dinero. Entre los futbolistas que se formaron en la cantera del Cádiz bajo su supervisión, se encuentran nombres como Pepe y Salva Mejías, Cortijo, Jose González, Antonio Calderón, Kiko Narváez, Quevedo, Barla y Arteaga. La labor de Morillo y sus colaboradores en la formación de estos jóvenes jugadores fue clave para su éxito.