Una acción a la media hora de partido en un robo de balón de Rubén Alcaraz a Dani Ceballos acaba con Gil Manzano pitando falta en contra del Cádiz y mostrando cartulina amarilla al centrocampista del conjunto gaditano, que entraba en cólera al no entender dicha decisión.

Y no le faltaba razón al bueno de Rubén Alcaraz porque en ningún momento toca el rostro de Ceballos como el futbolista del Madrid hace entender al colegiado y llegándolo a engañar. El acta refleja la acción como “impactar con su brazo a un adversario de manera temeraria en la disputa del balón”, algo completamente diferente a lo ocurrido y que es fácilmente comprobable a través de las imágenes de la retransmisión televisiva, en las que se observa cómo Alcaraz tan solo pone su mano en el pecho del rival. Ni es de manera temeraria ni hay impacto de ningún tipo. Por el momento se desconoce si el Cádiz va a recurrir dicha amonestación.