El Cádiz entraba en puestos de descenso esta temporada en la Jornada 19 tras caer frente al Granada en el Nuevo Los Cármenes. Un partido que, en boca del propio Manuel Vizcaíno, significó un punto de inflexión negativa en el equipo debido a que se tenía puestas muchas esperanzas de revertir ahí una ya una gravísima crisis de resultados acumulando por entonces seis derrotas y ocho empates en los últimos partidos.

Se pisaba por entonces la zona de peligro, pero por entonces la desventaja era mínima. Después de ese duro palo las cosas no mejoraron y llegaron dos derrotas más, con el consiguiente cese de Sergio González y la llegada de Pellegrino, la cual tampoco ha significado un efecto inmediato en los puntos conseguidos: tan solo 3 de 18 posibles.

Esta jornada tampoco ha favorecido a los intereses cadistas. Primero, lógicamente porque los amarillos siguen sin encontrar el camino al triunfo desde que en la Jornada 4 lo hiciera ante el Villarreal. La distancia ha ido aumentando partido tras partido desde aquel frente ante los nazaríes y ahora es de cinco puntos de un Celta que además por el momento gana el golaverage general después de empatar el particular, lo cual podría significar que recortar a los gallegos cinco puntos no sea siquiera suficiente.

Cabía la esperanza de dejar a la misma distancia al Mallorca que aún tiene que venir a Cádiz. Pero los baleares lograron vencer al Girona en casa por 1-0 disparándose hacia la decimoquinta posición con 27 puntos y a ocho de los cadistas. Entre Mallorca y Celta se queda el Rayo con 26.

La próxima semana el Cádiz recibe en casa al Atlético de Madrid el sábado. El domingo el Celta visitará el Bernabeu, el Rayo hará lo propio en Vitoria y el Mallorca visitará el viernes al FC Barcelona.