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Andrés Fleurquin se ha convertido en este inicio liguero en uno de los jugadores más importantes del inicio de la temporada. Su trabajo en el centro del campo está sirviendo para apuntalar esa parcela en muchos encuentros. Ahora sólo desea terminar el 2008 con los tres puntos de La Línea de la Concepción ante la Real Balompédica Linense. “La idea es terminar el año ganando los tres puntos en La Línea. Si se puede aumentar la distancia con respecto a los de atrás, mucho mejor. Pero independientemente del resultado del partido del próximo domingo, creo que se hizo una muy buena primera parte de la temporada y ojalá podamos seguir en la misma línea”.

Admite que puede ser más difícil hallar la concentración necesaria al ser el último partido del año y con los días de vacaciones a la vuelta de la esquina pero cree que hay que hacer un último esfuerzo el próximo domingo. “Quizás sea más difícil estar concentrados que en otro partido porque todos tienen hechos sus planes para irse de vacaciones. Pero creo que es importante mantener la concentración y estos tres puntos que nos jugaremos el domingo tienen el mismo valor que otros. Si lo hacemos igual que lo estamos haciendo, sobre todo en los partidos de fuera de casa, podremos seguir sumando. Puede sea algo diferente por viajar el mismo día del partido. Pero por el tema de irse de vacaciones, a ellos les puede pasar lo mismo también. Tenemos que poner todo de nuestra parte para que esos detalles no influyan en el desarrollo del partido”

Preguntado sobre la reacción de parte del público en alguna fase del partido ante el Real Jaén, no quiso darle más importancia al asunto. “La gente tiene todo el derecho de aplaudir, animar, silbar o lo que quiera. Para eso paga la entrada y nosotros tenemos que aceptarlo. Pero creo que al principio de liga pusimos el listón bastante alto. El público recibió un nivel y una velocidad de juego que es difícil mantenerlo durante todo el año. El domingo pasado por momentos se jugó mal y por momentos bien. Tampoco fue un partido horrible. Todo ello es normal pero mientras que vayamos primeros no debería preocuparnos”.

Tampoco cree que el bajón de juego en casa sea producto de la presión de jugar ante su público. “Lo que el futbolista del Cádiz siente ante su afición no es presión. Ésta siempre nos ha dado ánimos constantes independientemente de la situación del Cádiz. Yo, particularmente no me siento presionado para nada”.

No piensa que la afición sea ahora más exigente ni mucho menos que fuera conformista por aplaudir el descenso de Primera a Segunda. “El año pasado no se celebró ningún descenso, por ejemplo. El año del descenso de primera el público aplaudió porque el equipo técnicamente no daba más y había equipos mejores. De todas formas yo considero que si aceptamos los pitos del otro día, también debemos aceptar que nos aplaudan en un descenso. Lo que pasa es que a medida que van pasando los partidos los rivales nos van conociendo más y se va a hacer más difícil ganar, inclusive los de fuera de casa. Es cierto que nos está costando más hacer buen futbol dentro de casa que fuera. Los equipos que vienen a jugar en Carranza han cambiado su táctica en función de cómo juega el Cádiz”.