El próximo domingo el Cádiz comenzará su temporada de regreso a Segunda División tras el año en el pozo de la Segunda B. Su entrenador, Javier Gracia, se encuentra muy ilusionado y explicaba hoy en rueda de prensa que la motivación del equipo es total. “A dos días del partido estamos todos muy motivados y con ganas de la competición comience y lo haga bien”.
Un quebradero de cabeza es el que se le presenta para configurar la primera convocatoria. El Cádiz CF tiene a día de hoy a todos sus jugadores disponibles para el partido. Una circunstancia que ya se dio algunas veces el año pasado y que hoy el técnico navarro recordaba. “Complicado es siempre. El año pasado tuve problemas en muchas jornadas para dar convocatorias. Siempre va a haber jugadores que se queden fuera. Todos ellos son muy válidos y podría jugar cualquiera de ellos, pero tratamos de crear un once en una lista de 18 jugadores que te den amplias posibilidades a lo largo del partido. Si no hay ningún contratiempo de última hora, a día de hoy toda la plantilla estará disponible. Yo los veo a todos bien aunque haya gente que haya acumulado durante la pretemporada menos sesiones y minutos de juego por diferentes motivos. Igualmente hay jugadores que están físicamente un puntito por encima de otros por ello. Pero cuento con todos ellos y elegiremos a los que creamos que sea más conveniente.”
Sobre las posibles ausencias del rival, salvo la de Quique Martín, no cree que puedan significar mucho con respecto al nivel que pueda dar en Carranza la Unión Deportiva Salamanca. “Aún no sé la convocatoria del Salamanca pero sí se comenta que tienen algunos lesionados desde pretemporada, como son el caso de Quique Martín, de Toti. También hay otros que parecen que han caído esta semana como Lionel o Endika… no sé. Hemos visto partidos de este equipo en pretemporada y sabemos que tienen variantes en caso de que les falte algún jugador. Quizás la más importante sería la de Quique Martín por lo que significa en ese equipo, y que también fue compañero mío en el Villarreal. Creo que esa es la baja que, si se produce, más pueden acusar. Por lo demás, nos vamos a enfrentar a un equipo que juega bien al futbol, que trata de combinar y de llevar la iniciativa del juego. Esperemos que salgan bien las cosas.”
Comenzar bien la temporada lo considera muy importante y pide que todos vivan con intensidad no sólo este encuentro, sino todos los de la temporada. “Los comienzos en todos los aspectos son importantes. Dar el primer paso firme ayuda a seguir por el buen camino, a fortalecer el trabajo diario, la confianza y la autoestima. En este caso, como somos un equipo recién ascendido, nos daría esa dosis de confianza y de tranquilidad para seguir trabajando. Hay que hacerlo sabiendo que en cada partido nos va la vida y que hay que vivirlo con la misma intensidad que perseguí tanto en el equipo como en el entorno en la fase final de ascenso del año pasado. Esta liga hay que vivirla así cada domingo: cada siete días. Si no lo vemos así, nos llevaremos posiblemente muchos disgustos”.
El partido, que se jugará a las cinco de la tarde, presenta un hándicap con respecto a la climatología. El calor puede ser importante a esa hora y Gracia se resigna. “Esa pregunta creo que todos la contestamos igual: la mejor hora no es. Pero no se puede hacer otra cosa. Mi deseo era el de jugar el sábado para tener un día más de descanso de cara al partido de Copa. No se puede hacer nada al respecto y hay que tratar de aclimatarse al calor.”
El estado del terreno de juego es algo a lo que también está pendiente. Está algo mejor que en Trofeo y espera que siga mejorando en las próximas jornadas. “Lo he visto hace unos días. Sé que se está cuidando al máximo y vamos a intentar que mejore. Hoy está mejor y mañana entrenaremos allí. Vamos a pisarlo muy poquito haciendo muy poca cosa y sólo en una zona del campo. Entre todos debemos cuidarlo para que esté al menos en las condiciones del año pasado, que se encontraba en muy buenas condiciones”.
Habiendo jugado en Primera y en Segunda División, el domingo se estrenará en la categoría como entrenador. No cree que eso signifique mucho. “Yo soy de los que creo que para ser entrenador no hay que haber pasado, ni que sea necesario, una anterior etapa de jugador. Hay buenos entrenadores que no tienen un pasado como jugador. En estos saltos de categoría, la experiencia de haberlo vivido como jugador de Segunda y de Primera te sirve para ver que todo sigue muy parecido y que no ha cambiado nada. Aunque haya mayor nivel de juego o de efectividad de los jugadores, el nivel de exigencia es el mismo. A mí lo que me importa es mi trabajo y ésta es la misma del año pasado. Lo vivo con la misma intensidad, trabajando lo más que puedo y deseando que todo salga bien”.
Preguntado también por los últimos días del mercado veraniego, no quiso hablar demasiado para no desviar la atención a lo que ahora debe ser lo más importante: el partido del domingo. “Si digo que nada, diréis que no espero nada. Si digo que algo, diréis que estoy esperando que me traigan algo. Por lo tanto, diré que tenemos una buena plantilla y que todo lo que el club vea oportuno fortalecer, se fortalece. Y si no, con lo que tenemos que no es poco haremos una buena campaña. Estas cosas, a 48 horas de la competición no me parece lo más apropiado. Prefiero estar centrado en el partido y sé los jugadores que voy a tener y que voy a tener que descartar a varios para jugar. Falta de jugadores no tenemos. Las posiciones con las que se debería reforzar el equipo el club ya lo sabe pero eso no es mi trabajo. Ahora lo que me interesa es desviar la atención hacia otros aspectos y pensar en que el equipo que salga, que será un buen equipo, necesita el apoyo de la afición para que, entre todos, seamos capaces de conseguir los tres puntos”.