Tanto los empleados del Cádiz, como los bomberos y policías de la capital, han trabajado afanosamente durante toda la mañana del sábado para paliar los problemas que han ocasionado las fuertes lluvias caídas durante la madrugada y mañana de este sábado. Como casi siempre en estos casos, en los vestuarios del Ramón de Carranza y en sus instalaciones de tribuna, ha entrado diversa cantidad de agua.

A esta hora la situación parece estar controlada y las condiciones climáticas prevén un descenso continuado de las precipitaciones durante el resto del día.

En estos momentos, la zona ya no presenta el aspecto de esta mañana y todo hace indicar que el partido se jugará con total normalidad a partir de las seis de la tarde en el estadio gaditano.