Muchas jugadas complicadas han sido las que ha tenido por delante Valentín Pizarro Gómez en el partido entre el Cádiz y el Mallorca, siendo cierto que el colegiado del comité madrileño ha solventado la mayoría de ellas con acierto.

La más llamativa fue la que a instancias del VAR (en esta ocasión con Mateu Lahoz al frente) fue revisada: la expulsión de Iza Carcelén. En una contra el lateral cadista hacía falta sobre Dani Rodríguez en un llamado ataque prometedor. En primera visión parecía claro que el colegiado acertaba pero el VAR le reclamó que revisara una falta previa de Amath a Espino que provoca el robo de balón anterior al ataque. Después de verla y también comprobar que la falta de Iza no fue una agresión, lo cual habría anulado la jugada pero mantenido la roja al portuense, pitó la falta inicial al uruguayo para dejar sin efecto la expulsión.

También acertó en las dos amarillas a Sedlar que provocarían su posterior expulsión, así como en el clarísimo penalti de Sastre a Lozano con un empujón en la espalda del hondureño dentro del área.

Donde sí quizás existe mayor discusión es en el tiempo que se añadió de alargue, seis minutos que pueden parecer escasos ya que solo en la revisión de la roja a Iza se perdieron cuatro, uno más en la expulsión de García Plaza, quedando por añadirse las seis ventanas de sustituciones (tres del Cádiz y otras tres del Mallorca) realizadas en la segunda mitad, lo que deberían haber alargado el partido al menos dos minutos más.