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El Cádiz lograba vencer el pasado miércoles al C.E. L'Hospitalet en el estadio Ramón de Carranza, en el partido correspondiente a la segunda eliminatoria del campeonato de Copa del Rey.
Con un equipo plagado de teóricos suplentes y canteranos, el equipo amarillo y azul (que por circunstancias solo viste de amarillo), los de Risto Vidakovic no solo se impusieron en el resultado, sino también en el juego desplegado.
Aarón Bueno abría el marcador para el Cádiz, tras recibir un magnífico pase de Lolo Armario, quedarse solo ante Craviotto y anotar con una vaselina. Minutos después empataba Cirio, tras un disparo del que poco pudo hacer Álvaro Campos, muy acertado en las demás intervenciones.
En la segunda solo tiene un nombre y apellidos, y fue el de José Miguel Caballero, que con sus dos goles de idéntica factura lograba conseguir el 3-1 final y que daba el pase a la 3ª eliminatoria de Copa del Rey.
Con poco público en las gradas del estadio gaditano, fue la presencia en el palco del ex-presidente y máximo accionista del club Antonio Muñoz Vera, la que protagonizó todos los flashes de las cámaras.
También volvió al estadio Ramón de Carranza el que fuera jugador del Cádiz en la década de los 90, Quique Cárcel, pero ahora como director deportivo del L'Hospitalet.
La anécdota la volvieron a protagonizar algunos de los focos del recinto deportivo, que mediada la segunda parte se apagaron. Algunos vecinos de los edificios cercanos ayudaron con sus linternas a iluminar el césped, pero no fue hasta casi el final del partido, cuando la luz se reestableció por completo.
Reportaje de fotos:
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Jesús M. López 
03.09.2010
