En el pasado partido de Copa del Rey, el futbolista del Real Madrid, Denís Chèryshev, era alineado con el número 21. Y marcaba el gol que iniciaba la clara victoria madridista en el Ramón de Carranza. Era alineado, por lo visto, de forma indebida.
En ese caso, el Cádiz C.F, previa reunión de su Junta Directiva, decide reclamarlo ante la Real Federación Española de Fútbol, organismo directamente responsable de la organización de la Copa de Su Majestad el Rey. El resultado, de momento, el ya conocido: El Real Madrid ha quedado eliminado de esta competición.
A partir de ese instante, la enorme mayoría de aficionados y entendidos de fútbol, han puesto el foco en el club blanco, ya sea el Presidente, el Delegado, el Director General… en una búsqueda de culpables que, hasta ahora, no ha dado resultados ni ha gozado de “autocrítica”.
Pero, fiel a su papel de periodismo casposo, parcial y en ocasiones, insufrible, el programa del periodista Josep Pedrerol, entró en escena. Su Chiringuito de cotorras madridistas, ese club de fans de Cristiano Ronaldo y todo lo que, mínimamente, huela a blanco, se habían puesto manos a la obra, para poner de culpables a cualquiera que no esté en radio de varios kilómetros alrededor del Santiago Bernabéu.
Y en esas, el pseudo-periodista y “tronista” de ese programa, Alfredo Duro, hace un encendido mitin pidiendo a la afición del Cádiz, que exija a su presidente no reclamar. Si, si, aquel Alfredo Duro que tan “duro” (valga la redundancia) atizó al Cádiz y al cadismo durante los “Play-Offs” de ascenso, con el temita de las entradas de los oviedistas y las botellitas contra el Athletic de Bilbao. Y no se queda ahí, el otro “periodista”, de semblante serio capaz de ofender y malmeter solo con abrir la boca, José Luís Sánchez, espeta la siguiente frase: “A ver si el Cádiz lo tiene todo en regla”… expertos en tirar la piedra y esconder la manita.
Y si, para rematar toda esta cadena, tomamos como ciertas las palabras de Paco García Caridad, periodista de Radio Marca, donde afirma que el presidente Florentino Pérez, en “petit comitee”, suelta la siguiente perlita (Blanca, por supuesto): “No sé para que reclaman, ¿es que el Cádiz va a ganar la Copa?”
Pues verá usted, señor Pérez… NO, no vamos a ganar la Copa. Reclamamos porque el Cádiz es un club con problemas económicos, y otra eliminatoria podría venir de cine a las arcas del club. Reclamamos, porque toda España ha podido ver la irregularidad del Real Madrid, y pocos habrían entendido un “perdón” inexplicable hacia un futbolista sancionado que, para colmo, marcó el primer gol, aunque algunos lo hayan olvidado. Reclamamos porque, de haber sido al contrario, y con el Real Madrid derrotado en el campo, habrían reclamado como cielo hay sobre la tierra…
Pero, y digo yo, si es el Comité de Competición, al paraguas de la normativa de la RFEF, el que impone las sanciones, de forma automática, cuando se cumplen los requisitos establecidos… ¿Se puede saber la razón que impide que sea la propia RFEF la que vele por el cumplimiento de dichas sanciones?
Los clubes no deberían ser los “chivatos de la clase” que avisen a la RFEF cuando un jugador no cumple algún castigo impuesto y derivado de partidos anteriores con los que, probablemente, poco o nada tengan que ver. Los jueces, al imponerte una pena, necesitan un certificado posterior que verifique que has empezado (y terminado) de cumplir tu sentencia. Una multa necesita de la confirmación de pago mediante el impreso correspondiente…
Pero es mucho más fácil para la RFEF y sus comités sancionadores, imponer los castigos y que sean “otros” los vigilantes. Si el Cádiz calla, y el resto de los clubes callan, el Real Madrid alinea indebidamente a un jugador, marca gol, gana el partido y todo esto queda sin castigo, si el club afectado “se despista” o “lo perdona”, porque el Comité de turno “no entra de oficio”, a pesar del flagrante incumplimiento de la sanción. Anchas Castilla, pues. Bienvenidos al festival animado de la RFEF.
Afortunadamente, la inmensa mayoría del mundo del fútbol, culpa al Real Madrid, unos pocos a la RFEF y casi, casi nadie al Cádiz. Pero ese “casi, casi nadie” debería ser “nadie” a secas, si esta dichosa Federación, y sus eruditos Comités, cumplieran del todo con su trabajo, que debería ser sancionar y HACER CUMPLIR LA SANCIÓN. Vigilar y velar por sus cumplimientos…
… y no echarles más la mierda a clubes modestos que son los perjudicados por estos incumplimientos… o son vilipendiados u odiados si “osan” reclamarlo…
Miguel Daniel Vila
Aficionado al Cádiz CF