Los estadios de fútbol cada vez están más cerca de presentar una imagen normal, aunque esta jornada todavía el aforo máximo en el fútbol profesional era de un 60%. Pero en el Nuevo Mirandilla se respiraba hoy un ambiente especial a pesar de ser día entre semana. La visita del FC Barcelona y la victoria del equipo amarillo en Vigo disparó los ánimos de los aficionados que acudieron a la grada en el partido ante los blaugranas.

Buena parte del juego del conjunto de Álvaro Cervera se basa en el esfuerzo y el sacrificio, siendo este acompañado desde el público con gritos de aliento que dan ese plus de oxígeno en esos momentos en los que las fuerzas pueden flaquear. Hoy la afición cadista fue parte fundamental del punto logrado y por fin empieza a disfrutar de una categoría de la que pasada campaña no pudo.

Es más que posible que para el próximo partido en casa, frente al Valencia el día 2 de octubre, el aforo máximo permitido pase a ser el 80%. Al menos eso se espera que ocurra en la reunión que mantendrán el próximo miércoles el Ministerio de Sanidad y el Comité Interterritorial.