El entrenador de la UD Almería atendía a los medios de comunicación este viernes en la previa a su partido frente al Cádiz del domingo. Fernando Soriano comenzaba recordando la última derrota ante el Reus y los errores que a su juicio cometió su equipo. “La verdad es que no podemos volver a repetir esa imagen, creo que fue el peor partido de la temporada. El rival nos superó en algo que no debe ocurrirnos, que es la intensidad, en ese sentido nos sentimos superados y no lo podemos permitir. No tenemos que cambiar esa imagen, sino que vamos con las ganas e intención de salir a ganar el partido, a partir de ahí esa imagen es fundamental cambiarlo, si no es que no vamos a tener opción”.
También hizo balance de las virtudes del conjunto amarillo, destacando a jugadores en todas sus líneas. “Sus números lo dicen todo, tienen un jugador arriba que está haciendo arriba, unas bandas muy rápidas con Álvaro García en la izquierda, que está marcando las diferencias y me recuerda a Crusat. No le importa en momentos determinados ceder la posesión al rival, son igual de peligrosos porque te mantienen siempre en tensión. Bueno a balón parado con Aridane, Sankaré y Ortuño. Es un equipo muy solidario en defensiva, se juntan mucho, dificultan el juego del rival. Si están ahí arriba es porque están haciendo las cosas bien, y en su campo todavía más. Buscaremos sus debilidades para hacerles peligro”.
Aun así mantiene que su equipo no vendrá a especular con el resultado. Necesitan victoria y con esa idea se presentarán en Carranza. “No les preocupa mucho la posesión de la pelota, normalmente suele perder la posesión. La velocidad arriba es crucial. Es importante atacar bien, terminar jugadas, recuperar bien los balones con una buena presión y a partir de ahí intentar contrarrestarles. El ambiente será muy favorable al Cádiz por su afición, que querrá seguir apoyando para aspirar al máximo y nosotros enfocamos los entrenamientos en anticipar lo que nos vamos a encontrar el domingo, que no nos sorprenda ninguna situación y que hagamos nuestro partido ofensivo. No vamos con intención de encerrarnos y especular, nosotros vamos a ganar”.
A nadie se le escapa que afronta esta jornada en una situación complicada y que su puesto podría peligrar en caso de caer derrotado un partido más. “Yo me debo a este club y haré todo lo que pueda hasta el día que esté. No sé si me juego mi puesto o no, pero mi predisposición a ayudar en todo lo que pueda es máxima. Mi situación personal es buena, mi familia tiene salud y está feliz, me quedo con eso. Yo sigo trabajando bien, con cabeza alta y a partir de ahí, si haces bien tu trabajo, no tienes que venirte abajo. Eso intento inculcar a los jugadores. Quiero que la situación cambie esta semana”.