Espera su oportunidad si Jose introduce algún cambio tras la derrota en Lucena.

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Cuando un equipo pierde, y más como lo hizo el Cádiz el pasado domingo, es lógico pensar que puede haber algún cambio en el once inicial para el siguiente compromiso. Ikechi Anya siempre se muestra prudente y nunca quiere decir una palabra más alta que otra. Es todo un ejemplo de jugador que antepone el bien del equipo al suyo propio pero a pesar de ello deja entrever que tiene alguna esperanza para este sábado. “Estoy esperando la oportunidad de jugar. Pero la verdad es que los que están jugando ahora mismo están haciéndolo bastante bien: Toti y Ferreiro en las bandas. La verdad es que como perdimos es algo que no puede ocurrir. A ver qué es lo que decide el míster y si hay cambios bien. Si no los hay, hay que confiar en el equipo. No sólo por un partido hay que cambiarlo ahora todo”.

En Lucena entró en la segunda parte pero poco cambió la tónica del partido. Reconoce que su aportación y la de otros jugadores de refresco fue más bien nula. “Juanjo y yo entramos a la vez en el segundo tiempo pero las cosas no salieron bien. No pudimos aportar nada al equipo. Pero hay que olvidar este partido y pensar ya el del sábado ante el Écija”.

Sabe que es complicado disputar minutos sueltos y que eso no favorece al estado de forma. Por ello intenta hacer cada día un poco más de trabajo para estar en perfectas condiciones cuando le toque saltar al terreno de juego. “Voy consiguiendo la confianza del míster y eso es lo más importante. Si él cree que estoy listo para ser titular, estaré disponible. Yo me encuentro bien físicamente. Es cierto que cuando un jugador no juega cada semana es difícil, pero cuando es posible siempre intento hacer algo más con el preparador físico para estar dispuesto a ayudar al equipo”.

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