Llegó anoche y esta mañana ya estaba sobre el césped con sus compañeros en el entrenamiento. Un duro viaje de muchos miles de kilómetros que no le restan ganas a Jona para querer participar ya en el partido del sábado. “El viaje ha sido largo. Tardaré unos días a adaptarme al horario de aquí, algo que espero sea lo antes posible. Vengo con más ganas que antes. Yo quiero jugar el sábado al igual que todos los compañeros, pero tenemos que empujar todos hacia el mismo lugar. Hay que ganarse el puesto y ya está”.

Regresa de su participación con Honduras con un sabor agridulce pero contento con la experiencia. “Fui allí con toda la ilusión del mundo, pero fue complicado para mí porque era un grupo nuevo. Entre ellos se conocía más que yo. Me costó mucho adaptarme a su juego y a ellos mucho entenderme. Es normal que para la primera vez no salieran las cosas como uno quiere”. Las críticas que han llovido hacia su persona en ese país no le preocupan. “Me dan igual las críticas. Yo estoy contento con mi trabajo y lo que piense cada uno es su opinión por lo que hay que respetarlas. El que entienda de fútbol sabe que era muy difícil adaptarse tan rápido”.

Existe la posibilidad de una nueva marcha para la Bota de Oro, competición de selecciones que coincidiría con un posible playoff de ascenso. Jona por el momento lo tiene claro. “He venido al Cádiz para ascender, al igual que venimos todos. Cuando lleguemos al playoff todos querremos estar aquí para jugar”.

Sobre su estado de forma, todo perfecto. Las molestias que sufrió no revistieron importancia. “Fue una sobrecarga en el isquio y me dijeron que no entrenara. Pero fue solo cosa de un día. A partir de entonces allí se han dicho cosas que no eran ciertas”.

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