El meta del Cádiz, Alberto Cifuentes, ha querido zanjar cualquier problema con una posible presión añadida al jugar como local. Para el cancerbero “jugar en casa es un gustazo, ante nuestra gente. Es lo que queremos. Juntarnos de la mano con nuestra afición y con la prensa para conseguir nuestro objetivo. Ojalá fueran todos los partidos en Carranza. Estamos deseando que la gente aplauda, que ganemos, que marquemos goles, que la gente esté contenta. Es lo que deseamos. No pensamos en otra cosa. Es una presión añadida para el rival jugar en Carranza. Los chavales del Betis B daban saltos de alegría por el empate. Para nosotros es un gustazo jugar en Carranza. Y lo que queremos es que nos aplaudan y aplaudirles a ellos al final del partido. Como hacemos siempre. Tenemos que ir todos de la mano”.

Entiende que la gente no esté contenta y también reconoce que para cambiar esa situación es el equipo el que debe dar el primer paso en el campo. “Vamos a cambiarlo entre todos al entorno. Nosotros a ganar partidos. Es muy difícil salir de esta categoría, se demuestra con los años que lleva el Cádiz. Si no estamos todos juntos va a ser más difícil todavía. Los jugadores vamos a poner nuestro grano de arena, intentaremos ganar partidos y agradar a la gente. Así seguro que todo cambia y el viento será favorable”.

Sigue manteniendo que el trabajo del vestuario es encomiable y por ello pide confianza. “El equipo tiene una actitud increíble. Corre en cada pelota. Que no estamos haciendo el fútbol que queremos es cierto, pero el equipo se deja la piel, pelea y hace todo lo que puede. La tranquilidad absoluta es vernos trabajar día a día”.

Solventar algunos momentos complicados de partido es clave para Cifuentes. “Sobre todo el vernos ante el Murcia por detrás en el marcador. El inicio del día del Betis también, aunque la primera parte no estuvimos tan mal. En cuanto nos pongamos a favor, la dinámica cambiará. La derrota en Murcia hizo mucho daño porque el equipo no está acostumbrado a perder. Llevamos una derrota en Copa y Liga. Ante el San Roque nos costó un poco más. Esta semana estamos cogiendo tranquilidad, confianza con el balón”.

Recordó unas palabras de Luís Aragonés cuando fue entrenador suyo. “El inicio de temporada siempre se puede mejorar. Pero, joder, el que hemos hecho es bueno. Estamos a tres puntos del primero, metidos en la Copa… Vamos a ello. Además de que los objetivos se consiguen en la segunda vuelta. Tuve de entrenador a Luís Aragonés y siempre decía que en los diez últimos partidos es cuando se ganan las ligas”.

Y volvió a reincidir en la actitud del equipo. “El equipo tiene nivel y lo hemos demostrado. Lo mejor que tiene esta plantilla es que tiene un montón de actitud. Hemos pasado un pequeño bache y vamos a intentar recuperar este nivel de juego. La base la tenemos, que es el trabajo. A partir de ahí, un poco de calma”.