“Esto es un no parar”. Con esta expresión define Álvaro Cervera la actual situación con partidos cada tres días. Razón no le falta al técnico, que también explica que ello imposibilita la preparación de los encuentros como suele hacerse en la competición normal, como jornadas cada semana.

El Cádiz afrontará un nuevo compromiso y una vez más será un partido complicadísimo. Fuera de casa y ante uno de los equipos que lucha por una de las dos plazas de ascenso directo o, como mínimo, por una de las de playoff. La SD Huesca es, desde el comienzo de la temporada, una de las escuadras llamadas a estar arriba y en la confección de su plantilla está la prueba. Es un equipo hecho y trabajado para ese objetivo, con la presión que ello también conlleva. La pasada jornada se descolgó un poco tras ver cómo el Almería abría algo de hueco y en ésta, ante el líder, quiere demostrar que su apuesta es máxima.

El Cádiz querrá por su parte buscar fuera de casa lo que no está encontrando en Carranza, donde ha saldado sus últimos compromisos con empates. Cervera sabe, no obstante, la importancia que tiene puntuar siempre en estos casos y ese es el mínimo exigible hoy en El Alcoraz por parte de los amarillos.

Como en todos los encuentros de este regreso a la competición se verán cambios en los onces titulares. Los locales no tienen bajas por sanción mientras que en el Cádiz es Alberto Perea el único que se pierde el partido por este motivo, cumpliendo así el segundo de los dos con el que fue castigado tras su expulsión en Soria. En los aragoneses tampoco estará Dani Raba, lesionado tras el último choque ante el Albacete.