El técnico cadista, a día de hoy, da su plantilla por cerrada con la llegada de Florin Andone, del cual opinaba que “Creo que es un buen futbolista. Tuvo el contratiempo de la lesión, pero lo que hemos visto aquí da la sensación de que está bien, que nos puede echar una mano, entiende lo que es el juego del Cádiz y sabemos lo que le gusta”.
Añadía que, por lo que a él respecta, “la plantilla está cerrada. Estamos en el tercer partido y hay que mirar la plantilla que tenemos y con la que hay que trabajar. Hemos mejorado en ciertas posiciones y como plantilla hemos mejorado. Hay que sacar rendimiento. Añadía que "para mí la plantilla está cerrada. No pienso ahora mismo en ello porque llevamos mucho tiempo y no espero que pasen cosas ya. Ahora todos a pelear por jugar y a sacar rendimiento a la que tengo. Mi plantilla es la que he entrenado hoy y la que voy a entrenar mañana”.
Llama la atención que estas palabras llegan una semana después de que explicara que la intención era la llegada de dos jugadores más. Eso, ha explicado, no significa que no haya sintonía con la dirección deportiva. “Sintonía hay. Pero mi pensamiento es que la plantilla está cerrada. No vamos a darle más vueltas. Hace quince días seguíamos viendo vídeos de jugadores, ahora ya no se hace. No sé si mañana llamarán y me dirán algo pero ya no trabajamos en eso sino en el partido del domingo. No valoramos ya ninguna posibilidad”.
Algo que no le gusta y deja bastante claro es lo que está ocurriendo en las últimas temporadas con el mercado de verano, que se cierra una vez se han jugado varias jornadas. “Forma parte del negocio. Está así porque se quiere mantener así. Me gustaría que la gente trabajase en el período que tiene que trabajar, pero habrá gente a la que le interese que haya movimientos una vez empezada la liga. Como entrenador te interesa tener a todos los jugadores cuando comienza la competición”.