El técnico del Cádiz CF, Sergio González, manifestó su malestar y reclamó un uso más exhaustivo del VAR en decisiones clave, tras la polémica expulsión de Víctor Chust en el partido contra el Celta de Vigo, que terminó en empate 1-1. Sergio expresó su preocupación por la influencia de estas decisiones en la situación del equipo, que actualmente enfrenta el riesgo de descenso y pone en duda su continuidad como entrenador.
"Yo reclamo que con esas decisiones tan importantes vayan los árbitros al VAR y se tomen el tiempo que haga falta. No puede ser que esa acción nos condene como nos ha condenado, tal y como estamos y entramos en descenso., con una posición de un míster al que pueden echar", declaró, evidenciando su inquietud por el impacto directo de tales errores arbitrales en el futuro del club y en su propio puesto.
El entrenador del Cádiz no dudó en señalar la falta previa sobre Roger Martí, que consideró evidente, y cuestionó la jugada que derivó en la tarjeta roja a Chust. "Yo he visto una falta a Roger muy clara y luego Iago Aspas no toca el balón y Fali tiene opción de tirarse al suelo y cortar ese balón", explicó el técnico, subrayando la posibilidad de intervención de Fali en la jugada y la necesidad de una revisión más detallada.
Sergio concluyó su intervención mostrando su frustración no solo por los errores cometidos por su equipo, sino también por aquellos ajenos a su control. "Me calienta porque nosotros tenemos muchos fallos, para que luego haya fallos externos. Si me tiene que pasar algo que sea por mi culpa", sentenció, reflejando su disposición a asumir responsabilidades por los errores propios, pero exigiendo igualdad en el tratamiento de los errores arbitrales.
La situación del Cádiz en la tabla, sumada a estas controversias arbitrales, pone una presión añadida sobre Sergio González, cuya continuidad al frente del equipo podría estar en la cuerda floja y es consciente de ello.