Pidió ayuda para aquellos que a partir de ahora sean los encargados de llevar la gestión del club.

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Antonio Muñoz hizo un balance de la pasada temporada. Habló de responsabilidades, las cuales traspasa en el terreno deportivo tanto a Julio Fernández Peguero como a Javier Gracia, los dos hombres que según él fueron los únicos que tomaron decisiones para conformar la plantilla del Cádiz CF. “Yo no soy el máximo responsable de la planificación deportiva del Cádiz. Tengo la responsabilidad máxima del club y me responsabilizo de los errores que cometan las personas en las que delego. Quien planifica la temporada son el director deportivo y el entrenador. Por lo tanto, la responsabilidad directa del fracaso deportivo en cuanto se refiere a plantilla será de esas dos personas. Yo asumo mi culpa y mi responsabilidad por haberlos nombrado. Parece que nadie se ha enterado porque todos los palos son para mí. Yo no he confeccionado la plantilla. Yo sólo di el visto bueno a la plantilla que confeccionaron Peguero y Javi Gracia. Y eso no lo digo yo sino que lo dijeron ellos. Mi gestión en todas las demás cosas, creo que ha sido positiva. Tengo la responsabilidad de confiar en dos personas que se equivocaron y asumo la responsabilidad de esas dos personas que he nombrado yo. No puedo estar contento con la temporada ni con el resultado final de la misma”.

También explicó cuál ha sido su paso por el Cádiz como presidente, una época que parece que ahora acaba. Para ello basó su explicación en dos etapas marcadas por el antes y el después de la llegada de Arturo Baldasano. “Yo dividiría el tiempo que he estado en el Cádiz en dos etapas. La primera fue exitosa en lo deportivo, en lo económico y en estructurar el club. Pasamos de Segunda B a Primera y luego a Segunda División de nuevo tras una temporada digna en la máxima categoría. Estoy contento con esa parte y el club recibió un premio a la mejor gestión deportiva en aquella época. Luego, a partir de ahí. Se creó un clima que perjudicó mucho. Todo lo que habíamos hecho en base a un presupuesto equilibrado para sanear las deudas, se convierte en ‘Muñoz pesetero, gástate el dinero’. Como no podíamos dar lo que pedían, buscamos a alguien que lo dé. Vinieron unas personas que creímos que eran los idóneos pero se rompe todo el modelo nuestro y toda nuestra estructura con la marcha del director deportivo y el director general. Luego se hizo un escalón salarial en la plantilla. A partir de esas consecuencias llegan nuestros fracasos. Pero aquí nadie es culpable sino yo. Pero lo asumo, me voy y todos tan contentos”.

Terminó pidiendo compresión y ayuda para aquellos que ahora toman el relevo al frente del club y para los que en un futuro pudieran coger las riendas de la entidad. “Me dolería que al que venga se le hiciera lo mismo. Los medios tienen mucho que decir para que esto no ocurra. Dejad a los que vengan, o a los que van a empezar ahora, que trabajen en aquello en lo que de verdad crean. No por gastar más se consigue mejor plantilla y éxitos. Ayúdenle a llevar a cabo la política en la que creen porque los que están dentro conocen las cosas y por qué hay que actuar de una manera u otra en cada momento. Respetad las decisiones de los que empienzan ahora y los que vengan porque al final se perjudica al Cádiz”.