Álvaro García se encuentra adaptándose a su nuevo rol y nueva situación en el Rayo Vallecano. El ex jugador del Cádiz CF ha hablado de la situación que ha vivido en sus últimos días de amarillo, así como de la llegada a su nuevo equipo, en una entrevista concedida a Unión Rayo.
El utrerano habla de las diferencias que ha encontrado entre el juego del Cádiz CF y el del Rayo Vallecano, así como de la afición. "En el estadio aprietan a muerte, ya lo viví como rival. Nos gusta mucho. Tenemos ganas de darles alegrías. Están siempre atentos. A favor es una caldera. En Cádiz es parecido, también se vive muy intenso y a los jugadores nos ayuda mucho", reconoció.
Su deseo era el de jugar en el Rayo Vallecano porque "mostraron mucho interés. Fue algo que había que sentirlo y me vine para acá".
Y repasó lo que vivió en su difícil verano. "Fueron muchas noches sin dormir. Es algo que es muy difícil. Que hagan algo sin tu saber nada… pero bueno todo salió bien". Y admite que se sorprendió el anuncio de su venta al Huesca "iba conduciendo y me llegó un mensaje de un compañero dándome la enhorabuena. Miré el Twitter y me enteré. Fue algo rarísimo".
De las ofertas recibidas, Álvaro García explicó que "salió la oportunidad de China, el Cádiz dijo que no y salieron otras y también dijeron que no", y añadió que "el Cádiz es el dueño del jugador y es el que llevaba los hilos. Ves que vas perdiendo oportunidades, el año pasado me pasó algo muy parecido y pensaba que iba a pasar otra vez lo mismo".
Se vio jugando de amarillo otro año más "sí que me vi jugando en Cádiz, después de lo del Huesca fue bastante difícil" y sobre su fichaje por el Rayo Vallecano reconoció que "no me lo creía. Hasta que no empecé a entrenar no me creía que era 100% seguro. Me parecía imposible. Han sido muchas noches sin dormir, mi familia mal, mi pareja, eso la gente no lo ve. La gente piensa solo en su beneficio y no lo comprendo".
Guarda buenos recuerdos de Cádiz, pero sobre todo la posibilidad que tuvo de autoconvencerse de que servía para jugar al fútbol profesionalmente "En Cádiz fue cuando de verdad me di cuenta que me iba a poder dedicar a esto", concluyó.