El lateral zurdo Luis Pávez llegó al conjunto amarillo la temporada del ascenso a Segunda División, pero su participación no tuvo demasiado protagonismo. Disputó once partidos en los que tuvo 708 minutos y no gozo de la total confianza de Claudio Barragán ni posteriormente de Álvaro Cervera.

En las últimas horas el jugador chileno realizaba una entrevista en AS Chile y hablaba precisamente de aquella etapa con no muy buen recuerdo. "Iba muy ilusionado con mi señora, pero llegué allá y es una realidad super distinta, difícil". La distancia con su país y con su entorno se convirtió en un problema. “Uno está solo, no tiene amigos, familia. Por ahí en un mal entrenamiento, un partido, no tienes con quién hablar, con quién apoyarte, con quién distraerte. Eso me pasó la cuenta, estuve muy bajoneado con mi esposa”, manifiesta.

Reconocía que la situación llegó a ser muy complicado y que “tres meses, ya quería venirme. Extrañaba mucho y no estaba concentrado en el fútbol”.