EL CIERRE JM Sánchez Reyes/Diario de CádizUn modelo cuestionado
Suelo leer los foros. ¿Es una virtud o un defecto? Los relacionados con el Cádiz los sigo atentamente. No hay nadie dando la cara, como siempre. Opiniones detrás de un nick, simplemente. Es imposible saber si son verdaderas o interesadas, si pertenecen a quienes quieren meter cizaña o divertirse a costa de cuatro internautas. Esa es la duda que siempre queda. Pero de todo lo que leo, me centro en aquello que es vox populi. O sea, en lo que coincide la mayoría de los que vuelcan a la red sus pareceres.
Y viendo que el panorama del Cádiz no se aclara, reconozco que es pronto para hacer balance. El fútbol es tan imprevisible que quién quita que nuestro equipo se ponga de aquí a tres jornadas a tiro del ascenso. Aún así, ya hay quienes arrojan la toalla y a los foros me remito. Allí empiezan a cuestionar el modelo Muñoz.
Los que defienden al presidente, los menos por no decir casi nadie, recuerdan que salvó al Cádiz. Automáticamente escriben varios para recordar que el club se salvó entre todos y que el empresario no se hubiera metido en un sitio sin perspectiva de futuro. Como así fue y acertó. De la irregular marcha del Cádiz se culpa a la falta de riesgo económico de Muñoz a la hora de los fichajes. Y los que así piensan se remontan a la paupérrima apuesta en adquisiciones para quedarnos en Primera. A esa opinión me sumo. Esa es la cruda realidad.
Pero hasta que el panorama de este año no se esclarezca no se pueden hacer valoraciones. Entonces, si seguimos en la categoría de plata, será tiempo de indignarse. Ojo, digo indignarse y no de pedir explicaciones. Estamos ante una empresa que, como tantas otras en el balompié español, no entiende de romanticismos. Somos meros abonados, por mucho que nos duela. Pero las personas pasan y el cadismo seguirá vivo. Por siempre.