Antes de la celebración del Trofeo Carranza siempre tiene también su tradicional presentación en el Ayuntamiento de Cádiz. Esta edición LXIX del torneo veraniego, que enfrenta al Cádiz CF y a la US Lecce, fue pregonada por el periodista Roberto Gómez. El extremeño tiene una dilatada carrera en la información deportiva en medios escritos como MARCA, en radio con Cadena SER, Onda Cero y Radio MARCA y en TV con RTVE y Cuatro.

El salón de plenos del consistorio gaditano fue el escenario de dicho acto, que comenzó presentado por Jose Grima, Director de Comunicación del Cádiz CF, y el descubrimiento del cartel por parte del alcalde Bruno García, el presidente Manuel Vizcaíno y su autor Antonio Caro. Grima recordó aquella promoción del Cádiz - Málaga en la tanda de penaltis y “Roberto Gómez era el micrófono inalámbrico de la SER con el añorado Theo Vargas y gritaba la salvación del Cádiz”. Añadía también que “ha sido un privilegiado por compartido carrera con los mejores profesionales del periodismo español. Incluso podríamos decir que su periodismo ha sido reporterismo y ha sido capaz de adaptarlo con las nuevas tecnologías al siglo XXI”.

El cadismo es un amor unos colores, pero además una forma de andar por la vida: con honestidad, con humildad y, sobre todo, con orgullo hacia esos colores.

El propio Roberto Gómez reconocía que “es un día muy especial para mí, he de reconocer que llevo mucho tiempo con la ilusión de dar el pregón del Carranza. Estoy emocionado y hasta nervioso de estar en Cádiz, en su Ayuntamiento y en este marco incomparable. Eso es importante porque los nervios son productos de esta emoción. Recuerdo haber venido con unos 16 años al Trofeo. Venía con Pepín Cabrales que era el delegado del Cádiz en Madrid, algo que no tenía ningún equipo. Era un partido histórico porque la Cadena SER cortaba Hora 25 para retransmitir un partido de fútbol, algo que no pasaba nunca. Aquel año se cortó”. Fue un pregón muy radiofónico, aportando audios de personas que le felicitaban por ser protagonista en el día de hoy como Joaquín Sánchez, el alcalde de Madrid o su narración de aquella mítica tanda de penaltis ante el Málaga”.

También relató anécdotas de cadistas ilustres como Carmelo Navarro, Hugo Vaca, Paco Cervera o Rovira. Definió el sentimiento cadista como “una manera de entender la vida a través del fútbol. Los sentimientos no se pueden explicar pero sí contar. El cadismo es un amor unos colores, pero además una forma de andar por la vida: con honestidad, con humildad y, sobre todo, con orgullo hacia esos colores. Que nace desde la infancia pero que los padres y los abuelos lo saben transmitir”.