l colectivo Brigadas Amarillas ha emitido un comunicado oficial en el que denuncia la "represión y persecución" que han estado sufriendo por parte del club Cádiz CF. Según el comunicado, el colectivo explica que su falta de animación en los dos últimos partidos se debe a varios motivos, entre ellos la represión sufrida desde que decidieron señalar al palco como "principales culpables y responsables de la deriva deportiva que estaba soportando la entidad cadista, su inacción y falta de interés en detectar y corregir los graves problemas de planificación y estructuración que lamentablemente nos ha llevado a un indeseado descenso de categoría".
Brigadas Amarillas también denuncia que se les cortó "sin previo aviso, la megafonía que utilizamos para iniciar y unificar los cánticos y gritos de aliento desde nuestra grada, con los que pretendemos contagiar al resto del estadio".
El colectivo añade que "en el último partido tan trascendental por sorpresa y sin margen para una posible alternativa o solución se nos prohíbe media hora antes del encuentro, sin dar la cara ni con ninguna comunicación previa, la entrada de los elementos de animación que venimos utilizando desde nuestros comienzos (bombos, banderas, megáfono y pancartas, etc.), todo ello poniendo como pretexto la repentina interpretación de varias personas identificadas como miembros de La Liga, indicándonos que ahora es contrario a sus normas. Incluso absteniéndose los miembros de la policía allí presentes, pues nada de lo allí argumentado como pretexto iba en contra de la Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte".
El comunicado continúa explicando que "de ahí los cinco minutos iniciales que, como protesta, decidió llevar a cabo nuestro Colectivo".
Además, Brigadas Amarillas critica la actitud del Consejo de Administración "que ha priorizado crear mal ambiente a escuchar críticas a su gestión en la denominada final más importante de la temporada, que con posterioridad se podían haber tomado todas las acciones que se considerasen necesarias para la resolución de lo que se entendiese como perjudicial para la entidad".
Finalmente, el colectivo lamenta que "también se nos impide por parte del Club una reunión con los jugadores con el único interés de demostrarle nuestra incondicionalidad para todos aquellos que quieran seguir defendiendo este escudo y mantengan al tope la implicación con los valores que nos caracterizan como sociedad centenaria".