Los números del Écija en las últimas jornadas hablan por sí solos. Dieciséis puntos de dieciocho posibles le han aupado hasta el sexto puesto de la tabla. Ha dejado en las dos últimas semanas en la cuneta tanto a Albacete Balompié como este domingo al Cádiz CF. Su entrenador Miguel Rivera estaba exultante tras el encuentro. “Le digo que disfrute del trabajo de estos profesionales. Aunque me ponga pesado tenemos que seguir en la línea que cogimos hace seis o siete semanas y seguir trabajando con toda la humildad del mundo. Cuando esto empezaba nadie pensaba en ganarle a un Albacete y a todo un Cádiz. Y además ganándole, porque hay cosas y cosas. El equipo hizo un trabajo soberbio y solo se les puede dar le enhorabuena y brindarle esta victoria a nuestros aficionados”.
 
La implicación de todos los jugadores en el campo y la concentración durante todo el partido, han sido para el técnico malagueño los pilares principales en los que su equipo ha construido esta victoria. “Hemos salido diferentes porque el Cádiz es un grande y no nos podemos relajar un instante. Hemos trabajado mucho sobre eso y además sabíamos que queríamos ser nosotros con y sin balón. Apretar y atacarles. Era nuestra propuesta y la hemos hecho de principio a fin. Hemos salido a buscar la portería contraria con profundidad basada en nuestro fútbol y la que el terreno de juego nos permite”.

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