Con el objetivo de plasmar una buena imagen en los torneos universitarios de España y llevar un nombre por la geografía nacional vio la luz, en el año 1999, el equipo de fútbol de la Universidad Católica de Murcia, formado por los alumnos que mejor jugaban al balompié en el Campus. Compitió por primera vez, dando sus primeros pasos, en Territorial Preferente durante la temporada 1999/2000, logrando el ascenso a Tercera División.

Consolidándose en el fútbol del sureste español, el UCAM CF fue confeccionando un proyecto que tomaría fuerza en el verano de 2011, cuando unió sus fuerzas con el Costa Cálida CF para avanzar kilómetros en su escalada. Nació entonces el UCAM Murcia CF, tal y como se conoce hoy día. Tal fue la fuerza de este proyecto que se plantó en Segunda División B en la temporada 2012/2013.

Una primera vuelta irregular no pudo ser arreglada por el efecto de la llegada de Luis García Tevenet al banquillo. La reacción no fue suficiente para salvar la categoría, aunque el regreso a la Tercera División fue tan efímero como revulsivo. En mayo de 2014, el UCAM Murcia CF regresaba a la división de bronce y, esta vez, con la ambición por bandera y La Condomina como escenario. Matriculándose en la carrera del fútbol. De la ilusión.

Se convirtió en la competencia del Cádiz CF por el liderato durante la temporada 2014/2015, haciéndose en el arranque con la primera plaza hasta que en febrero le sería arrebatado por el equipo de Claudio Barragán en el Ramón de Carranza. Finalmente, quedando segundo, el UCAM fue eliminado en la segunda ronda de la fase de ascenso por el Bilbao Athletic, mismo equipo que privó del ascenso al conjunto cadista. Al año siguiente lo volverían a intentar.

Por fin, en la temporada pasada se vería reflejado el sueño de un equipo que nació en el Campo de Fútbol de Guadalupe hace diecisiete años. Después de ganar veintidós partidos, empatar once y perder solo cinco, con cuarenta y seis tantos a favor y diecisiete en contra, el UCAM Murcia CF terminó la temporada regular 2015/2016 en primera posición con setenta y siete puntos, a seis del segundo, el Real Murcia.

El Real Madrid Castilla era la primera y única piedra en el camino del conjunto universitario por el sueño de la división de plata. El dos a uno en La Condomina y el dos a dos en el Alfredo Di Stéfano alzaron al UCAM Murcia CF a LaLiga 1|2|3. Y no se conformarían con eso, sino que dos semanas después se proclamaron campeones de la Segunda División B al derrotar al Reus Deportiu en la tanda de penaltis tras dos empates a cero. A Segunda, por la puerta grande.

Y este domingo regresan al Ramón de Carranza con el espíritu universitario que les caracteriza, regresan a un estadio en el que han empatado peleando por la salvación, han perdido peleando por el liderato y han ganado para certificar el primer puesto que les llevaría a Segunda. Regresan a un lugar que, en cierto modo, forma parte de su breve, pero intensa historia. El alumno que levantando la mano aventajó a sus compañeros de clase regresa a la Tacita con matrícula de honor para sacarse el doctorado en plata.