Han pasado casi dos años de aquel 31 de mayo de 2015, día en que el Real Oviedo conseguía en el estadio Ramón de Carranza el ascenso a Segunda División y día que algunos oviedistas prefieren recordar más por aquellos 155 a los que la Policía Nacional les negó la entrada al estadio gaditano que incluso por la gesta de su equipo.
El grupo Symmachiarii ha sido el encargado de reavivar la polémica, solicitando a través de un comunicado que "se rompan relaciones o trato de cortesía hacia la junta directiva del Cádiz o su representación hasta que al menos tengan la deferencia de pedir disculpas públicamente a los implicados y la afición oviedista en general".
Recalcan que "nosotros como implicados, o la afición en general del Real Oviedo, no ha recibido en estos casi dos años la más mínima muestra de arrepentimiento o sentimiento de culpa por parte de la directiva que preside el Sr. Vizcaíno, que si bien no nos devolvería la experiencia perdida, sí que al menos nos resarciría a nivel personal el recibir una disculpa por un hecho lamentable por el cual fuimos agraviados".
Symmachiarii explica que todo se debió a "una actuación fruto de la mala organización por parte del conjunto gaditano, que privó a 155 personas con la entrada comprada desde Oviedo por los cauce legales, pudiera acceder al estadio debido al descontrol que se produjo en los accesos del mismo".