El partido entre Cádiz y Málaga dejó algunas acciones polémicas. Una de ellas fue a falta de veinte minutos para el final, cuando Bare hizo una dura entrada a Correa en un contragolpe del conjunto cadista. Todo el mundo esperaba la amarilla para el jugador malaguista, que era su segunda y debía ser expulsado, pero el colegiado Gorostegui Fernández creyó oportuno solo pitar la falta.

El público de Carranza protestó la decisión del colegiado y hasta Víctor Sánchez del Amo estuvo rápido para quitar del terreno de juego cuanto antes al albanés y lo sustituía inmediatamente por Boulahroud.

También se protestó en el último minuto que el colegiado vasco cortara por no dar la ley de la ventaja una clara contra del equipo gaditano en el último minuto.