Admitía el técnico del Granada que el partido de hoy había sido complicado para los suyos por muchos factores. No puso ningún pero a la derrota y espera afrontar de la mejor manera el siguiente. “Dije en la previa que sería un partido incómodo. No entramos bien al partido y hemos estado imprecisos. Y eso ante un equipo que aprovecha sus oportunidades es extremadamente complicado. La segunda parte no ha tenido continuidad y la verdad es que no ha sido un buen día. Dicho esto, Es nuestro cuarto partido en once días, recuperaremos la semana que viene y a afrontar el siguiente partido de la mejor manera posible”.

No opinó del arbitraje y sí felicitó al rival. “Del arbitraje sabéis que no opino. Tenemos que revisar el vídeo, lo analizaremos todo e intentaremos mejorar y corregir. Damos la enhorabuena al Cádiz por la victoria y su permanencia. Debemos sentirnos orgullosos de estos jugadores. Tenemos 45 puntos a falta de cuatro jornadas, cuartos de final en Copa donde te elimina el campeón, cuartos de final contra el United… Eso lo hubiese firmado. Estos jugadores nos están dando tanto, que ahora más que nunca hay que apoyarlos”, explicaba Diego Martínez.

En resumuidas cuentas, insistió en que “faltó eso, la precisión. Tuvimos errores no forzados y no dimos continuidad al juego. Acabamos con uno menos y se nos lesiona Kenedy que acaba de entrar. Había poca dinámica de juego y muchas interrupciones. Ha habido un número de errores en pases muy alto y no metes ese gol que a ellos le pudiera meter el miedo en el cuerpo. No ha sido nuestro día y esto es el fútbol. Ahora tenemos una semana importante para recuperar. La verdad es que el equipo está extenuado física y mentalmente”