El Girona FC, quiere dejar atrás este sábado todo lo ocurrido en sus partidos fuera de casa con cinco derrotas consecutivas, busca mejorar su rendimiento en Montilivi, donde ha mostrado solidez con solo una derrota esta Liga, específicamente ante el Real Madrid. La aspiración a clasificarse para la Champions League es una motivación adicional, y el entrenador Míchel, a pesar de su confianza, mantiene precaución, señalando que no se fía del Cádiz. Este equipo, aún sin victorias como visitante este curso, busca puntos cruciales para la permanencia. Es un equipo que hace cosas bien, con Sergio también las hacían. Tuvieron dos/tres años muy buenos. Con Sergio la tendencia hizo que estuviese fuera, pero es un gran entrenador. Ahora el Cádiz es diferente, pero también juegan con un 4-4-2 y es un equipo que ahora está en buena dinámica. Cuenta con jugadores peligrosos y Juanmi están en un buen estado de forma y hace goles. Lleva cuatro porterías a cero en los últimos partidos y es un equipo muy peligroso. Nosotros tendremos que hacer un gran partido, ser nosotros mismos. En estas siete jornadas todos los equipos se juegan muchas cosas. Hemos de hacer grandes encuentros para sumar los tres puntos”.

Para este enfrentamiento, Míchel enfrenta la baja de dos jugadores significativos: "Tsygankov y Stuani no han entrenado y están casi descartados", reconociendo las dificultades que esto conlleva. Ante la ausencia de Stuani, el joven Carles Garrido del filial, con 14 goles en los últimos 13 partidos en la Tercera RFEF, será convocado: "Carles estará en la convocatoria, es un jugador que tiene facilidad para hacer goles", afirmó el técnico, destacando la importancia de la cantera en momentos críticos.

Sobre el rival, el madrileño comentó que el Cádiz, aunque diferente bajo nueva dirección técnica, mantiene cualidades que lo hacen competitivo: "Es un equipo que hace cosas bien... ahora está en buena dinámica". También reconoció la importancia de la preparación mental, enfatizando que "Para mí es muy importante que el jugador vea que cuando está focalizado en el juego se hace de manera espectacular".

Finalmente, Míchel resaltó la importancia del apoyo local en Montilivi y el enfoque mental necesario para superar los desafíos, diciendo que "lo más importante es el rendimiento" y que "la presión es para los dos" equipos, enfatizando la necesidad de un esfuerzo conjunto y la búsqueda de la mejor versión del equipo para aspirar a los más altos logros.