Gran noche de fútbol que deparaba el encuentro entre Cádiz y Cartagena, dos equipos que apuestan por el buen estilo de juego. El conjunto de Javier Gracia presentaba una convocatoria netamente ofensiva pero el once inicial no cambió muy poco con respecto al que saltara la pasada semana en Albacete. Enrique en la banda derecha y López Silva volvieron al equipo tras recuperarse de sus problemas físicos.
El Cádiz comenzaba haciendo valer su vitola de local y puso empuje y ganas en buena parte del comienzo del partido, con llegadas al área rival que no pudieron ser finalizadas, una vez más, por los hombres de ataque. En el primer minuto López Silva intentó una vaselina casi desde la línea de fondo para sorprender a Rubén pero esta se marchó ligeramente alto.
La mejor de esas ocasiones fue la protagonizada por Caballero, que tras recibir un pase en profundidad de Ogbeche se plantaba ante Rubén pero no pudo sortearlo y el balón fue parado por el portero con su cuerpo. La espalda de la defensa albinegra era vulnerable pero el equipo amarillo no era capaz de sacar rendimiento a ese aspecto.
Dos ocasiones más tuvieron los amarillos por medio de Ogbeche en sendos cabezazos que se marcharon desviados. Más tarde fue Abraham quien lo intentaba desde fuera del área sin demasiada suerte ya que las manos de Rubén, en dos tiempos, deshacían la ocasión.
Pasaba la media hora y el Cádiz había intentando golpear primero sin acierto. Y, como ocurre en el boxeo, el fajador pasó al ataque y en el primer golpe del Cartagena mandó a la lona al púgil contrario. Toché aprovechaba un pase de Víctor para ganarle la espalda a Raúl López, que volvía de una jugada anterior, y no perdonó batiendo a Casilla por bajo. La calidad se impuso al trabajo, como casi siempre suele pasar en este deporte.
Los de Javier Gracia se encontraron a partir de ese momento sumidos en la desconfianza y el desorden hizo aparición en el Cádiz. Los siguientes minutos el Cartagena fue haciendose con el control del partido y una nueva jugada por la derecha sirvió para que De Lucas pusiera el 0-2 en el último suspiro de la primera mitad.
Noqueado el equipo cadista, comenzó la segunda parte con la entrada de Toedtli por Carlos Caballero. Sin tiempo para nada un córner en el primer minuto de la reanudación fue suficiente para rematar el partido por parte de los visitantes. El balón llegaba al primer palo para que fuera prolongado al segundo y ahí Víctor, el jugador más bajito de los que estaban en el terreno de juego, convirtió de cabeza el tercero para los suyos.
El Cádiz tocaría arrebato dando entrada a Fran Cortés y Diego Tristán pero poco más pudo hacer. Se limitó a llegar por banda y meter balones en el área. Muy pocos de ellos con la suficiente pericia para ser rematados. Uno de ellos le cayó a Mariano Toedtli en los pies y, en un palmo de terreno, recortaba con la pierna derecha para mandar el balón a la red con la izquierda. Un bello gol del ariete argentino que todos esperaban sirviera para al menos conseguir el empate en los últimos diez minutos que restaban.
Pero no llegaron más goles y el conjunto cadista caía derrotado por el marcador más abultado de su inicio de temporada ante un Cartagena que supo fajarse en defensa para luego demostrar que su contundencia en la zona de ataque es uno de sus mayores valores.