El técnico del Cádiz analizaba una nueva derrota del equipo amarillo. La segunda fuera de casa y la tercera de la temporada. El estado del terreno de juego, la expulsión y los goles del rival estuvieron presentes en el discurso de Alberto Monteagudo en la sala de prensa del Príncipe Felipe. “Ha sido un partido equilibrado por los dos equipos pero el campo, aunque es cierto que el Carranza la pasada semana estaba mal, estaba peor. Tenía mucho barro y era difícil mantenerse de pie en el campo, según me decían los jugadores. Era un partido de cero a cero, y en el 43 de la segunda parte, con la expulsión y el gol en la falta de ellos, se acabó perdiendo. El equipo, por el trabajo general, ha merecido un punto, el mismo que ha merecido el Cacereño. En la segunda parte incluso ha habido momentos en los que parecía que estábamos más enteros. Perdimos un punto y nos vamos jodidos porque queríamos encadenar dos victorias y, si no podía ser, al menos lograr un empate para que la semana que viene coger el partido con ilusión”.
 
Sobre la expulsión de Bermúdez, cree que no fue merecida. “Me pilla de lejos pero creo que es injusta. Llevamos muchos partidos quedándonos con un jugador menos. Tuvimos que hacer un cambio que no estaba previsto. Te ayuda a perder el partido. Estas cosas hacen que te vayas con cero puntos y no poder darle continuidad a un gran partido como el del domingo”.
 
Reconocía que el equipo no había tenido apenas oportunidades durante el partido. “Belencoso ha estado a punto de no salir en el descanso por una molestia. No podía correr y a ver si no está roto. Pablo no ha aguantado por un problema de espalda. Indiano y Villar estaban ahí pero tampoco han podido enganchar. No hemos tenido ninguna oportunidad en el partido. Excepto la de Garrido en el córner. Sabíamos que iba a ser así, a balón parado o por el error de alguien. Y al final fue a balón parado”.

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