Le preocupa la dinámica del equipo, sobre todo viendo que otros conjuntos son capaces de ganar partidos mientras el Cádiz no. Además, cada vez está más cerca la zona de descenso. “No acabamos de ganar y cuando no ganas el Cádiz está más abajo. Ves que el Cartagena pierde, el Albacete con el Écija… todo el mundo gana y cuando no lo haces tú cada vez la preocupación es máxima. Ojalá que al romper la dinámica de perder signifique ahora ganar partidos, pero si seguimos así pelearemos por no descender que por otra cosa”.
Comprende que su puesto esté en el aire. En el momento de la rueda de prensa aún no había hablado con Gaucci sobre su situación y esperaba a una reunión del Consejo de Administración. “Estoy a 700km de mi casa, con mi familia y todo mi futuro pasa por mi puesto de trabajo. No da tranquilidad que tu puesto esté en la picota y más como está la vida y el fútbol. Pero he sido jugador y sé que la única manera de sacar los resultados es haciéndoles creer a los jugadores que se puede ganar y ganando. Veo un poco de prisas en algunos jugadores y eso lo trasladan con poca finura en momentos puntuales. No atacamos igual que antes, no hemos ganado y eso significa que el entrenador esté discutido por todo el mundo”.
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