Lo primero será que el equipo deje de jugar tensionado y sepa hacer lo que deben. Blanco está trabajando durante la semana también el aspecto psicológico de la plantilla. “Siempre les digo que si salen nerviosos al campo van a jugar peor. Tienen que salir tranquilos y eso es lo que vamos a intentar. Lucena es un campo complicado. Esperemos que llueva para que esté un poco más rápido porque si no será muy lento. Ellos tienen cogidas las medidas al terreno de juego pero tenemos al equipo mentalizado. Sabemos que vamos a sufrir, igual que ellos, para conseguir un buen resultado. Poco a poco el equipo está comenzando a saber soportar esa presión. A Lucena vamos a la guerra porque si queremos jugar al toquecito nos van a comer. Tienen un sistema de juego muy definido y que no van a cambiar. Presionan mucho, juegan en espacios muy reducidos. Nosotros también sabemos lo que hay que hacer”.
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