No ha sido hasta hoy miércoles cuando el delantero tinerfeño ha tocado balón por primera vez de que se produjera una rotura fibrilar en Écija y para la que estaba previsto un período de tres semanas de recuperación. Airam Cabrera quiere estar cuanto antes, aunque también es consciente de que podría ser prematuro. Por ahora, sus ganas están por delante de cualquier cosa. “Estoy mejor de lo previsto y  creo que un poco por delante de los plazos. Estoy contento porque las sensaciones están siendo buenas y ahora veremos cómo sigo evolucionando. Quiero estar cuanto antes y no quiero regalar ningún plazo. No sé si estaré para el domingo. El día a día irá marcando. He estado haciendo cosas con balón y no me descarto para nada”.

Ha visto con cierta envidia sana que el equipo ha podido materializar goles sin su presencia en el césped, pero está contento de que eso haya ocurrido así. “Los partidos que he podido ver desde de fuera me dejó una espinita clavada porque creo que podía haber aumentado mi cuenta, pero de todas formas contento porque aquí estamos todos para lo mismo: que el equipo sume punto sea quien sea el que haga los goles”.

Tras la derrota ha encontrado a sus compañeros con la moral alta y con el deseo de que llegue cuando antes el partido del domingo para conseguir en casa tres puntos más. “El vestuario está bien. Somos conscientes de que es un traspié. Jugar con diez tanto tiempo es complicado. Son cosas que pasan. El equipo trabaja bien durante toda la semana para ganar cuanto antes, porque queremos que La Hoya pague los platos rotos. Queremos demostrarle a La Hoya que Carranza es nuestra casa y que no se nos van a escapar los puntos”.

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